Inventario Juvenil
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Alfredo Godínez

El fútbol: magia y poesía.

Ha empezado el Mundial de Alemania 2006, evento que ha dejado sorpresas a propios y extraños, empezando por un Trinidad y Tobago sacándole un empate al sobrado Suecia y una Argentina que sufrió ante los elefantes africanos (Costa de Marfil).
Un mundial donde según los comentaristas de TV Azteca, cuenta con una asistencia de por lo menos 45 mil mexicanos, quienes se fueron a apoyar a la escuadra de Lavolpe al más puro estilo del mexicano: sin dinero, con mucho alcohol y un corazón enorme, esperanzado en poder encontrar un boleto para entrar a alguno de los partidos que México tendrá en la primera fase del Mundial.
A través de la televisión hemos podido ver demasiadas imágenes, dignas de admiración, las cuales sólo puede crear el fútbol: aficionados de distintos países unidos en torno a un evento, una Alemania que recibió el Mundial para demostrar que después de una guerra aún se puede vivir y mejorar las condiciones de antaño, y a la comunidad futbolística que guardó un minuto de silencio en el partido inaugural, en memoria del padre de Oswaldo Sánchez, el cual falleció recientemente.
También observamos con el corazón en la mano a un Oswaldo hacer a un lado el dolor y sacar fuerzas de las entrañas por amor a la playera que representa, al País donde nació, y a toda una hinchada de mexicanos que ven en él a un dios de las porterías.
México ganó y lo hizo muy bien. Defendieron un estilo. Dieron lo mejor de si para agradecer el apoyo de casi 30 mil aficionados en el estadio de Nuremberg, quienes cantaron el cielito lindo, vitorearon cada pase bien dado por la oncena de Lavolpe y agradecieron con el alma la presencia de San Oswaldo Sánchez.
Un partido que se jugó con poesía en la cancha, tal vez no hay el gambeteo que ofrece Brasil, pero hubo eso a lo que un escritor recurre al momento de escribir: tripas, disciplina y pasión.
Por dos horas existió un País unido, que hizo a un lado sus problemas económicos, escolares, amorosos, etc., para sentirse por un rato parte de esa Selección y proyectarse en el jugador preferido del Tricolor o mutarse en Lavolpe y pensar en los cambios adecuados para ver a su equipo ganar. Como siempre y como nunca, cada que juega la escuadra azteca los mexicanos olvidaron esas pequeñas fronteras que lo dividen del otrora y se unió con el panista, perredista, priista, católico, evangélico, chiva, americanista, puma; para unir sus voces y gritar: ¡Viva México cabrones!, ¡Irán, Irán a probar el chile nacional!, ¡Irán, Irán a chin… a su madre!
Y esto, sólo lo puede hacer el fútbol.
Alex Lora, el vocalista del otro Tri, el del rock mexicano, escribió una canción que habla de una suposición: Sí México ganará el mundial:
Si México ganara el mundial/ cuantas cosas pasarían/ después de 15 días todavía seguiría el vuelo abajo del Ángel/ y si México ganara el mundial/ habría miles de borrachos tirados en las esquinas del centro histórico
Si México ganara el mundial/ los comercios tendrían que cerrar/ y toda la policía no alcanzaría pa´ aplacar el jubilo nacional
Si México ganara el mundial/ habría tanto relajo de noche y de día / que sería como un eterno carnaval
Habría viejas encueradas bailando en las esquinas / gritando México! México!
Cerrarían las escuelas,/ nadie trabajaría por lo menos en un mes,/ no habría ninguna actividad…
El viernes el juego será contra Angola. Esperemos México vuelva a contar con la ayuda mágica del papá (q.e.p.d) de Oswaldo Sánchez.

Enrique Agüera: el Rector mago.

El pasado viernes concluyó el seminario Los retos de México, que la BUAP y la revista político-cultural Nexos, organizaron con afán de poner en la mesa de discusión los temas actuales que preocupan o deben preocupar a todos los mexicanos. La conferencia magistral Agenda Nacional entre los rezagos y los nuevos desafíos, contó con la participación del escritor Héctor Aguilar Camín, conductor del programa Zona abierta, Leo Zuckerman y Soledad Loeza. Seminario que a lo largo contó con grandes conferenciantes como el caso de José Woldenberg, entre otros más. Y que a lo largo de su realización tuvo una asistencia importante de los universitarios.
Sin duda Enrique Agüera sigue demostrando su interés por poner en alto el nombre de nuestra máxima casa de estudios.

De la ficción a la realidad.

El jueves de la semana pasada en Profética se presentó Jueves (para guardar al amor de la ausencia de mañana) el nuevo poemario de Mariano Morales y el cual está compuesto por 11 poemas.
Pero el atractivo real, fue el poder revivir una reunión que sólo la narración testimonial de Pedro Ángel Palou nos dejó imaginar en su novela Quien dice sombra (Joaquín Mortiz, 2005) y en la que creímos sería la última reunión de esta generación, aunque sea de forma ficticia. Así es, Miguel Donoso Pareja, aprovechó su pasó por México, para ser específicos por San Luis, Estado al que asistió para recibir un reconocimiento y desvió su retorno para pasar a Puebla, ciudad donde impartió años atrás un taller literario, con el cual se inició toda una tradición y donde participaron: Juan Carlos Canales, Juan Gerardo Sampedro, Mariano Morales, Günter Petrak, Oscar López y Pedro Ángel Palou, entre otros. En esta nueva reunión el gran ausente fue el autor de El diván del diablo (Ediciones B, 2005) y quien fue recordado con mucho cariño al momento de hablar, por el poeta Donoso. También faltaron Petrak y Bonilla. Gilberto Castellanos y Amelía Domínguez, alumnos de Donoso en otros talleres, también estuvieron presentes.

Inventario Sentimental.

Un rico fragmento del texto Vivir y escribir publicado por Palou en su blog: El tipo ese que se dice escritor, se plantará entonces frente a su máquina, su estilográfica, su lápiz o lo que sea y subirá ese mundo, haciéndolo otro, nuevo, diferente.  Con sus propias leyes y sus propias cochinadas.  Pero habrá sido determinado por cada beso que dio y cada beso que dejó de dar.  Por un paseo, una escena, un ambiente, un grito, una sirena, una súplica, una entrega.
Me persigue un fantasma/ que adolece todo mi cuerpo,/ llenándolo de enorme melancolía. (http://alfredogodinezycia.blogspot.com). Mientras Palou reflexiona y los mexicanos esperamos un triunfo nuevo de nuestra oncena tricolor.